Realidad, felicidad y drogas

La felicidad, ese estado constante de bienestar en el que el equilibrio emocional se encuentra al máximo, esa cúspide del placer emocional, la paz interior, la sonrisa sale fácil, mientras la vida se torna placida y rica, primero que todo hermano lector, la felicidad, no existe, y si existe, es momentánea, no es permanente, los humanos no estamos programados para ser felices, alguna vez, una líder de la cruzada, que era bastante abusiva con sus discípulos preguntó: ¿ustedes son felices? porque si no son felices, no se cumple en ustedes la palabra que dice que dios vino a darles una vida con sentido y felicidad, bueno, ella dijo eso, la biblia no lo dice, la biblia jamás promete la felicidad, pero yo, yo me cuestioné, la mayor parte del tiempo sonreía, pero no, no era feliz del todo.
 
Ella tampoco era Feliz, era esa búsqueda de la felicidad lo que la llevaba a ser una persona abusiva, quería viajar en avión adonde los demás iban en bus, quería mas diezmos, mejores ropas, más cosas materiales, gritaba y hería a sus discípulos, pero lloraba y le pedía al señor compasión por ellos, era una loca, pero si era feliz, es porque estaba loca, nadie lo es, en su esencia, por eso buscamos sedarnos, con drogas, religión. fe, autoayuda, yoga, clonazepam, fluoxetina, marihuana, ron, bazuco, todos, todos, absolutamente todos, tenemos una droga, que va desde la promesa de la felicidad eterna en el más allá, hasta el subidón inmediato de la línea de cocaína que aspira el empresario y el gamín.

Los hombres corremos presurosos por el dinero, porque el dinero nos promete la felicidad, y felicidad creemos es alcanzar lo que deseamos, con dinero se abren las piernas, hasta las más bellas, con dinero se paga la salud, con dinero, se consigue amigos y hasta se es un sabio, un profeta, y un santo, sin serlo.


la peor droga de todas es el amor al dinero, eso jamás se lo quito al cristianismo, el drogadicto ha de saber que tan maligno es su propio habito, pues los pastores son aficionados al dinero, pero amigo que lee estas líneas, la felicidad no existe, no se castigue por su tristeza, o por su ira, no se flagele por no salir de la enfermedad mental, o por su amargura, no se de tan duro cuando piense que la vida es una cárcel de monotonía, o admita que es horrenda, brutal, despiadada, y que después de tanto esfuerzo infructuoso, usted morirá, y no valdrá que tenga todo el oro del mundo, simplemente, dejara de existir, se apagará como la llama que apaga el viento, si esto te pone triste, no importa, no llames negativo o positivo a nada, todo hay que vivirlo, quizás entonces se dé cuenta, que no ser feliz no es tan malo como piensas. 

Y si no eres Feliz en el trabajo, no te preocupes,  Nadie lo es, Ni Nacho Vidal....


Comentarios

Entradas populares de este blog

El absurdo de "Matar el ego"

Zaratrusta busca mujer....

La cultura del agradecimiento excesivo